Tengo una buena noticia, y una mala. La buena es que fracasaste. La mala es que todavía no lo sabés.
Tengo una buena noticia, y una mala. La buena es que fracasaste. La mala es que no lo entendés.
Tengo una buena noticia, y una mala. La buena es que fracasaste. La mala es que insistís en cambiar de vida, como si se tratara de un electrodoméstico defectuoso que todavía se encuentra dentro del período de garantía.
Tengo una buena noticia, y una mala. La buena es que fracasaste. La mala es que no lo entendés.
Tengo una buena noticia, y una mala. La buena es que fracasaste. La mala es que insistís en cambiar de vida, como si se tratara de un electrodoméstico defectuoso que todavía se encuentra dentro del período de garantía.
6 comentarios:
Vaya novedad.. Por eso compro los electrodomésticos con garantía extendida..
Duro.
Buena noticia: Fracasaste
Mala noticia: Se fundió el Duna.
No me hostiguen, no pregunten por qué. Por tara, por deficiencia, por asociación, tiendo a relacionar el fracaso con los conductores de remises en Fiat Duna. No hay más motivo que mi estupidez evidente. Pero es lo que hay.
Saludos!
¿Por qué el fracaso es la buena noticia?
Perdón mi inmadurez o incomprensión hacia el texto.
Y por favor no me venga con explicaciones paternalistas acerca del beneficio secundario del fracaso.
Salvo que se interprete que la primera es mejor noticia solo en relación a la segunda,
¿Me explica?
*geoffrey firmin! su comentario podría mostrar su estupidez evidente, pero en verdad muestra algo, a mi juicio, mucho más relevante y fidedigno. muestra que yo fracasé. muchas gracias.
Siento haberle dado una buena noticia, entonces. ;-)
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