Luego, digamos unos diez años después, en el ámbito laboral (hacía mucho que no escuchaba dos palabras que combinadas oliesen tan feo: ámbito laboral), algunos compañeros decían, aunque tal vez no lo decían, pero yo tengo esa extraña facultad de leer las mentes, decían entonces: ‘plata o muerte’.
Más allá de considerarme, en mis días inspirados, una persona con una imaginación bastante por encima de la media, me pregunto con estupor qué frase vendrá después.