25.1.06

Osado

Cada mañana en un bar, me cuestiono mi vida. Sufro a la manera tradicional, pensando que todo pudo haber sido diferente. Me reprocho no haber tenido una vida más original, más vertiginosa, más aventurera. No haber sido cantante de rock, o cazador de cocodrilos es algo que debiera atormentar a cualquiera. No haber saltado en paracaídas. No haber participado en una sudorosa orgía en un yate. En Mónaco. No haber peleado contra una pitón embravecida en el Amazonas. No haber retado a duelo a Bob Dylan por los favores de una rubia con ojos de miel. No. Nada.
¿Qué pienso hacer al respecto? Nada, también nada. En absoluto. Son estas cosas que pienso las que dan un sabor particular a mi café con leche con medialunas.

2 comentarios:

Miguel Ángel Quinteros dijo...

algunos dirán que no hacer nada es el camino mas cómodo, el mas fácil, el menos sacrificado, y les daré la razón

J. Hundred dijo...

*miguel quinteros! usted no sólo se equivoca, sino que no sabe que se equivoca. y a mí me da la impresión que si supiera que se equivoca, igual se equivocaría.