Te la hago fácil, lo vas a entender porque es fácil. Soy la persona ideal para cuando todo lo demás te salió mal. Soy perfecto para cuando todo lo que tenías planeado fracasó. Para cuando lo que podríamos denominar, si es que resulta preciso denominarlo de alguna forma, cuando tu plan A se va a la mierda, entonces, por motivos fáciles de entender aunque difíciles de explicar, me encontrás a mí.
Cuando te das cuenta que no se va a cumplir ninguno de tus sueños infantiles, cuando descubrís que tu tío te violaba a los once años, cuando encontrás a tu marido encerrado en el baño de servicio masturbando al Fox Terrier pelo duro de tu vecino del séptimo B, cuando te percatás que te casaste y tuviste tres hijos pero no podés dormir al lado de esa cosa que tenés al lado, nunca más, cuando captás que tenés la vagina más seca que una baldosa de porcelanato, cuando percibís que la felicidad se fue como una luz debajo de una puerta, cuando te das cuenta que te meterías un turrón en el culo y subirías a la terraza, justamente, con el turrón en el culo a cantar ‘satisfaction’ bailando igual, casi igual que Mick Jagger en aquel recital (Super Dome, New Orleans, 1981), cuando te pasa todo eso, cuando te pasan esas cosas, ahí aparezco yo.
Y te parece que todavía es posible, que un rayo de sol atraviesa los pesados nubarrones de tu tragedia personal e intransferible, que quizás te queden fuerzas para seguir adelante, que tan solo necesitás tomar aire, un par de cafés con leche, aún te queda una oportunidad.
Entonces te das cuenta que aquello que debió sucedernos, debió sucedernos antes. Te das cuenta que te equivocaste, que, como casi todo el mundo, te perdiste en el camino, no te fijaste bien y se nos hizo tarde. Y te enojás mucho, conmigo, es natural.
Cuando te das cuenta que no se va a cumplir ninguno de tus sueños infantiles, cuando descubrís que tu tío te violaba a los once años, cuando encontrás a tu marido encerrado en el baño de servicio masturbando al Fox Terrier pelo duro de tu vecino del séptimo B, cuando te percatás que te casaste y tuviste tres hijos pero no podés dormir al lado de esa cosa que tenés al lado, nunca más, cuando captás que tenés la vagina más seca que una baldosa de porcelanato, cuando percibís que la felicidad se fue como una luz debajo de una puerta, cuando te das cuenta que te meterías un turrón en el culo y subirías a la terraza, justamente, con el turrón en el culo a cantar ‘satisfaction’ bailando igual, casi igual que Mick Jagger en aquel recital (Super Dome, New Orleans, 1981), cuando te pasa todo eso, cuando te pasan esas cosas, ahí aparezco yo.
Y te parece que todavía es posible, que un rayo de sol atraviesa los pesados nubarrones de tu tragedia personal e intransferible, que quizás te queden fuerzas para seguir adelante, que tan solo necesitás tomar aire, un par de cafés con leche, aún te queda una oportunidad.
Entonces te das cuenta que aquello que debió sucedernos, debió sucedernos antes. Te das cuenta que te equivocaste, que, como casi todo el mundo, te perdiste en el camino, no te fijaste bien y se nos hizo tarde. Y te enojás mucho, conmigo, es natural.
17 comentarios:
después de leer esto: "cuando te das cuenta que te meterías un turrón en el culo y subirías a la terraza, justamente, con el turrón en el culo a cantar ‘satisfaction’ bailando igual, casi igual que Mick Jagger en aquel recital (Super Dome, New Orleans, 1981), cuando te pasa todo eso, cuando te pasan esas cosas, ahí aparezco yo"
Ya no pude seguir de la risa, del llanto...las lágrimas no me dejaron ver con claridad. Pero me quedé pensando que para estar mal ese ser humano es bastante ocurrente...y la imágen, mi bien, desopilante.
Besos
¡La puta!, ¿como se hace para dejar un comentario digno para este artículo? No se me ocurre nada a la altura. Saludos.
No he llegado a la aberración aun (porque meterme un turrón en el culo segun tengo entendido es una aberración, una desviación, algo con 'ión'), ni a tener chicos, ni tengo un vecino con perro, pero sí me he enojado mucho, muchísimo con su propuesta. Usted no tiene derecho, desde ningún punto de vista, a meterme el turrón en la herida sangrante de mi frustración.
Si aquello de debió suceder hubiera sucedido antes, no hubiera habido forma de evitar que se transforme en "esa cosa que tenés al lado". el Pan B es siempre maravilloso por simplemente no haber sucedido antes. Una vez que el plan A se fue a la mierda, aprendí a valorar el Plan B, mejor dicho, los planes B, sin pretender ni añorar que se transformen en A.... Para qué arruinar lo intenso del Plan B? Jamás me enojo con el Plan B, por no haberlo encontrado antes... y me encanta ser el plan B del otro y que el otro lo sea. No se me ocurriría jamás intentar transformarlo en A. Renuncio al plan A, definitivamente, no creo que sirva. No se puede evitar transformarse en la cosa que tenés al lado, ni que el otro se transforme en esa cosa cuando pasa el tiempo. He sido plan A 2 veces y plan B muchas pero muchas más. Me quedo en B, y no vuelvo al A salvo que enferme de algo que todavía no se bien cómo se llama... Un saludo.
Su agente de marketing personal debe tener una personalidad definitivamente interesante...
Fantástico. Conmigo, en cambio, se enojan del modo más clásico. De la forma más chata. Son enojos basados en mi falta de imaginación, que es realmente pavorosa.
Me lo merezco, no hay duda. Yo siempre llego temprano.
Un saludo.
*alelí! un beso para usted.
*viejex! con un par de ladridos de perro salchicha, estará usted a mi altura sin mayores inconvenientes. un saludo.
*anónim(a)! tiene razón, acepte mis disculpas.
*lara! veo que domina usted con amplitud todo lo concerniente a los planes A y B. si llegara a existir la posibilidad de un plan C, por favor, no deje de avisarme, dígame dónde me anoto.
*nefertiti! agente de marketing personal? lo qué?
*yoni bigud! envidio los enojos que usted menciona. mis frágiles escápulas deben soportar, cual latigazos, las impías boletas de todo lo que les salió mal a lo largo de sus, por decirlo de algún modo, candorosas existencias.
jaja! los planes B ya son C,D....Z, y vaya a saber qué más que aún no sé. No hace falta anotarse... si verdaderamente se renuncia al plan A, las letras se suceden en forma ordenada, placentera e inevitable naturalmente. Un saludito.
la persona que lo promociona digamos... bueh... no importa... perdió la gracia jaja
Hola Maestro. Leí el artículo de la Oblogo de hoy. Un lujo.
*lara! al parecer, como usted dice, si verdaderamente se renuncia al plan A, uno descubre que todavía queda un abecedario por delante.
*nefertiti! está muy bien.
*gemiliano! es increíble lo que oblogo ha hecho por estos míseros fragmentos. gracias.
Que sos ? Dioooooooo? jejej
Muy buen post, yo necesito un plan B!
Y desde hoy no como más turrón.
(también me trajo oblogo. Y si no fuera porque el tiempo me falta y mucho, leeria todo su archivo. El plan B es leerlo de ahora en adelante.)
pero si se hubieran conocido antes, estaría buscando el plan C. turrón..no.. prefiero el mantecol.
I'm not back, sólo me gusta contradecirme
Caia: mantecol tampoco querida, yo sé lo que le digo.
En este blog, el verbo mantecolear tiene otras connotaciones.
ay Condesa, no me diga que metí la pata (qué raro yo..) Tendré que leer todo el blog para ver a qué se refiere?
*amanda pan! quizás lo único que necesitamos, todos, sea un mísero plan.
*yojimena! no se me ponga tan remilgada.
*caia! bueno, bueno, ya está, ya pasó.
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