Disculpame, no se me ocurre otra forma de explicarlo que con
un ejemplo. Uno debería ser capaz de decir lo que quiere decir sin analogías ni
metáforas. Así como uno debería vivir, estar contento o triste, sin importar si
tu vecino cambia el auto, si viste a una madre empujando la silla de ruedas con
su chiquito parapléjico, o si alguien que conocés se está cogiendo a una divina
pibita de veintidós años. Solemos funcionar por comparación, somos un asco.
El ‘querer’, el estado de querer, como deseo, bien podría
compararse con la cocaína. El ‘tener’, el estado de tener, como satisfacción,
bien podría compararse con la marihuana.
Cuando querés, te volvés más interesante de lo que jamás
fuiste, te crece un motor que te hace brillar y seguir. El mundo se vuelve
entretenido mientras buscás lo que querés, no importa lo que sea. Mientras
querés, se ve quizás la mejor versión de vos.
Cuando tenés, te aflojás. Te brota una bobalicona sonrisa y
podrías quedarte mirando por la ventana, el mundo es una peluda mascota que te
hace un par de mimos. Agradable y soporífera sensación.
Y así vamos viviendo, somos una particular y única
combinación de querer y tener, somos eso, no mucho más que eso, esa singular
proporción.
9 comentarios:
... y a veces no hay más que opio.
Creo que tal vez las sabias palabras de Don Inodoro Pereyra resuman lo dicho por usted
- Mendieta, uno se deslumbra con la mujer linda, se asombra con la inteligente... y se queda con la que le da pelota.
*rob k! cuando uno descubre que no hay sustancia que le venga bien, que las sustancias que funcionaron también dejan de funcionar, ahí el problema empieza a ponerse de lo más divertido.
*a. torrante! yo he tenido la suerte que no me saliera prácticamente nada de lo que yo quería. pero, lo reconozco, no es un elixir para cualquiera.
Hola, se nota que tenés un ínfimo conocimiento sobre drogas, perdón, pero la comparación ni siquiera tiene sentido.
Pasaba yo a decirle que usted es un imbécil de gran magnitud, un ignorante total sobre los más nobles asuntos de este pasar; pero al leer el comentario que me precede noto con sorpresa que además de mi fastidiosa reiteración adolezco fatalmente de originalidad para decírselo. Y bue, un radikal K, ¿qué se puede esperar? Un trasnochado perdido en la olvidada transversalidad, tal vez.
Yo soy un asco, usted ya lo sabe; y funciono por comparaciones, claro. A mí me sirve. Y reflexiono sobre el carácter efímero del querer y el tener, sobre la intrínseca permutabilidad de los anhelos y la falsa saciedad de las posesiones, sobre lo pernicioso de este infinito espiral, y que tal vez, no sé, digo yo, que la famoso "puerta de entrada" no es la que todos dicen, que nos precede a todos, que viene de mucho antes, incluso antes que te pregunten "qué querés ser cuando seas grande".
Un fuerte abrazo para usted. No nos deje nunca.
Como sus escritos suelen provocarme cierta reflexión y veo el comentario de Camilo me pregunto: ¿será realmente motivo de jactancia saberla lunga al tema de las drogas?
Luego, parece que Camilo hizo un curso de PNL, porque lo dice en positivo. Distinto hubiese sido: "no sabés un carajo sobre las drogas".
En cuanto al exíxir, hasta que no cambie mi situación económica: Zumuva Tetra Blanco Dulce. Y no, no soy ningún bon vivant, pero no me importa.
*camilo radikal! que nos vaya bien a todos.
*mr. kint! quienes suelen leer las nimiedades que escribo, se dividen, básicamente, en dos grupos. los que no les interesa nada de lo que digo, y los que no lo entienden. antes que usted intente rebatir mi argumento, que por su claridad y precisión adquiere rasgos de sentencia, bueno, hay algo más. lo verdaderamente importante, lo que subyace, es que la sumatoria de ambos grupos, bien cabe en un ascensor, de servicio, de un edificio, de barrio (almagro, sí, yo diría, más que probablemente). lo que refulge, lo que brilla como un sol en un amanecer en la playa, entonces, es la absoluta irrelevancia que nos contiene, nos cobija, nos acuna. por decirlo de algún modo, nos abarca. un abrazo con respeto, si la contradicción es admisible.
*a. torrante! en mi derrotero personal, en mi particular, cotidiano, intransferible via crucis, en aquello que podríamos denominar, si es preciso denominarlo de algún modo, ‘la realidad’ o peor aún ‘mi vida’, el 97% de la gente con la que me toca lidiar me repugnan de una manera difícil de describir, no digo clasificar. y yo no sé durante qué etílico extravío se me ocurrió pensar que por escrito podía ser diferente. digamos que escribo porque es una necesidad fisiológica, una secreción, como cagar, como escupir, como meterse el dedo en la nariz o ver llover. lo demás es lo de más. eso no me impide agradecerle(s) la cortesía en esta desde ya curiosa ocasión. algo más, una cosa más, sobre saber o no saber de drogas. por cada cuatro millones y medio de tipos que deben saber de drogas tanto como carlos alberto garcía moreno, quizás haya uno o dos que sean capaces de componer una canción que te llegue al alma. si yo veo un partido de básquet de la selección argentina, lo más probable es que diga ‘mirá ginóbili, se quedó pelado mal’. eso habla de todo lo que sé respecto al básquet, lo de quedarse pelado me sale bárbaro. lo que quiero decir es que a veces ponemos el foco en lo que podemos.
en instantes, continuaremos con la programación habitual.
"Solemos funcionar por comparación, somos un asco"....me quedo con esa frase, creo que define mucho.
Hay también alguien que lo lee porque lo disfruta.....no sea tan jodido.
Abrazo!
*dany! puede ser, lo admito, que existan personas como las que usted menciona. pero no me consta. 1abrazo.
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