15.12.08

Boludo light

En la televisión entrevistan a una autoridad en dietas, en gordos, en métodos para adelgazar. El hombre se ha vuelto una suerte de celebridad, y habla como sólo un pastor o un chamán podría hacerlo, alguien que está seguro de poseer conocimientos que al resto de los mortales les han sido negados.
Su particular método, el método que le ha dado fama y fortuna, consiste en contar las calorías, en obligar a sus pacientes a comer, por ejemplo, mil doscientas calorías por día, o mil cien. Trata a sus pacientes como adictos, explica lo de siempre, que una aceituna engorda lo mismo que un churrasco, que las harinas son el Hitler de la alimentación, que quien de un mordisco a un chocolate es un enfermo sin alma.
Son estos sujetos, la linealidad de sus pensamientos, la certeza que los sostiene amparada en las cuatro operaciones matemáticas básicas, quienes me repugnan de una manera que me cuesta definir. Estos pontífices del yogurt, estos sabios bajas calorías, que afirman y castigan hasta que los sorprende un cáncer o un piano en la cabeza. Estos pelotudos impiadosos que se regodean en sancionar todo lo bueno que pueda tener la vida. Me dan mucho odio. Y me dan hambre, también.

6 comentarios:

Yoni Bigud dijo...

Páseme el dulce de leche y uno de aquellos pancitos saborizados.

No, los otros.

Un saludo.

Bugman dijo...

Podría decir que ser gordo no es saludable, que una alimentación balanceada alarga la vida, que los señores panzones tienen menos oportunidades con las mujeres. Podría decir todo eso, pero no lo digo porque es de mala educación hablar con la boca llena.

Anónimo dijo...

Comámosnos entonces, pancita incluída.

J. Hundred dijo...

*yoni bigud! el dulce de leche está dentro de esa delicada categoría de lo no negociable. un saludo.

*bugman! no es que uno sea gordo. es que cambió mucho la industria inmobiliaria. se están construyendo los ambientes más chicos.

*cachirula! pase, póngase cómoda. deje su ropa al lado de la mía.

Alelí dijo...

mmmmm rico post!

mi ropa dónde la dejo?

J. Hundred dijo...

*alelí! la noto, la percibo, técnicamente, con la actitud correcta.