5.9.11

Por culpa de la bebida

Tenés que entender que en esa época yo tenía la enfermedad de la bebida. Tomaba como mínimo una botella de vino por comida, almuerzo y cena. Y después del trabajo, o me quedaba en los bares del centro tomando gin tonics hasta que me echaban, o si volvía a casa, bueno, entonces tomaba tres whiskys después de la cena, generalmente cinco.
Por eso te pegaba, no está bien que diga que no era yo, porque vos estabas ahí recibiendo los golpes, Mónica, y sabés que los golpes te los daba yo. Pero no era exactamente yo, era yo en medio de una etílica nube. Flotaba en alcohol, y entonces me venían como eléctricas corrientes de pura furia, de odio, de ira.
Claro que te pegaba, buenísimas trompadas, o con el cinturón, con la parte de la hebilla, te pegaba porque estabas ahí, por eso, y te apagaba cigarrillos en los brazos o en los muslos, y vos chillabas como un animal, a mí no me importaba.
Maté al perro, lo maté yo, Mónica, eso nunca te lo dije. Llegué un día a casa totalmente borracho, y ese absurdo pekinés se puso a saltar y a dar su concierto de agudos ladridos. Lo alcé, lo acaricié un poco, el perro estaba feliz, y lo tiré por el balcón, así de una, ni lo pensé, todavía lo estaba acariciando y de pronto lo tiré como si hiciera un pase de rugby. El perro voló siete pisos y se hizo mermelada contra la avenida.
Quise violar a la nena, Mónica, por eso estuvo como un año sin hablar. Pará, la manoseé un poco nada más, te explico. La nena ya tenía como trece años, calculo, le habían empezado a crecer los zapallitos, y vos la dejabas vestirse con esas calcitas. Le ponías calcitas apretadas. Y vos no querías coger conmigo. Un domingo a la tarde, ya me había bajado más de media botella de ginebra, y me la quise sentar un rato encima. La apoyé un poquito, así, vestida. Le dije que si decía algo la mataba, le dije que iba a entrar una noche a su cuarto y la iba a estrangular con un alambre. Por eso la nena tenía problemas en el colegio, por eso la nena anduvo sin hablar, como tartamuda, unos seis meses. Después se puso bien, vos viste que después se recuperó mucho.
Cogí con tu hermana, Mónica, una vez que vino de visita. Cogí con tu hermana, le puse cocaína en el clítoris y acabó como 33 veces, tuve que pasar un trapo después para secar el parquet. Acababa y lloraba y decía que yo estaba loco, que ella era una mala hermana. Se le dieron vuelta los ojos, pensé que había tenido un ataque de epilepsia pero no, era simplemente una interminable sucesión de acabadas. Por eso dejó de venir, por eso cada vez que venía de Madariaga de visita se quedaba en un hotel del centro. Decía que estaba muy ocupada, a lo sumo nos aceptaba un desayuno en algún bar, o ni siquiera eso.
Ah, los ladrones. Nunca entraron ladrones, Mónica. Tu madre había vendido el departamento y te había dejado la plata para que se la cuides. Eran como ochenta lucas, y yo había empezado a jugar al poker por internet. Me fumé las ochenta lucas en una semana. Tuve que inventar lo de los ladrones, para poder llevarme la plata. Me acuerdo que tu vieja se puso remal, tuvimos que internarla. Quedó muy mal, de los nervios, nunca volvió a ser la misma.
Por eso te llamé, porque hace como dos semanas que no tomo. Pasamos buenos momentos juntos, yo creo que ahora lo nuestro puede funcionar.

15 comentarios:

yaz! dijo...

existen ocasiones en q el silencio es la mejor respuesta.
mis mas sinceros saludos.

Zeta dijo...

No me equivoqué. Este también me encantó. Otra vez te felicito. Hay algo en tu modo de escribir que atrapa. Eso es talento.

Saludos.

Dany dijo...

Brutal. No me pidas que vuelva a tratarte de pelotudo....con esta entrada,no. Veremos más adelante. Abrazo!

Familiarizada dijo...

eso se llama sincericidio

Zeithgeist dijo...

lo que no sabe el pankeke de la confesión, es que su jermu ya esta con otro que la golpea mas fuerte, se viola a la nena y TODAS sus amiguitas, sube las fotos de porno infantil a internet, la hace trabajar de puta en panamericana y se droga con paco en vez de tomar alcohol.. Las mujeres somos tan complicadas...

Samain dijo...

Será que, al margen de lo que hayamos hecho, siempre pensamos que nos merecemos otra oportunidad?
Bah... por ahí estaba borracho y ya.

Yoni Bigud dijo...

Y lo peor de todo es que podría funcionar. Lo peor de todo no, lo asombroso. Eso va mejor.

En el fondo, estimado, todo es una cuestión de perspectivas.

Refulgente lo suyo.

Un saludo.

gamar dijo...

Y fueron felices tal vez.
Muy bueno.

Mr. Kint dijo...

Si se hace borrón y cuenta nueva entonces mejor resolver viejas contiendas y dejar las cosas claras. No se deje llevar por los derrotistas que advertirán que las segundas partes nunca son buenas. Esa máxima sólo se cumple ante memorables primeras partes.
Muy bueno lo suyo. Saludos

PD: una vez una chica insistió con leer algo que yo había escrito, creo era menos por interés que por compromiso o qué se yo, ella me superaba en edad y tenía esa cosa entre maestra y madre y una fascinación por una juventud que comenzaba a abandonarla, tal vez andaba confundida en la búsqueda de algún oculto diamante al cual pulir, vaya uno a saber; machacó y machacó tanto que cada vez cogía menos y rompía las pelotas más, la cuestión se aproximaba peligrosamente a un matrimonio. Entonces le mandé algo, una gilada, de esas mías, de nulo valor literario, ya sabe. En fin, el resultado superó mis expectativas: jamás volvió a mencionar el asunto. Tiempo más tarde saqué el tema y me dijo que al leerlo le había resultado muy "creepy" -ese fue el término que usó-. Buenas gomas y un culo que era un trofeo; le paso su relato y sus datos, quizá ud. corra la misma suerte.

J. Hundred dijo...

*yesica! están quienes dicen ‘el silencio es el lenguaje de Dios’. también están aquellos que dicen ‘callate y seguí chupando’. o sea, hay muchísima gente ahí afuera, diciendo un montón de cosas. 1saludo.

*zeta! tal cual, como usted dice. además, sé hervir arroz. gracias, y un saludo.

*dany! he sido subestimado desde que puedo recordar, he sido subestimado desde siempre. quiero decir, no es algo que me sorprenda ni me genere mayor incomodidad. un abrazo.

*familiarizada! yo me siento un rato y escribo. usted puede ponerle el nombre que más le guste.

*zeithgeist! me han contado, he visto algunos videos, existen hombres con pitos particularmente largos, curiosamente gruesos. en mi caso particular, en cuanto a mí respecta, lo que suele generar exquisitas paspaduras en las chicas, dulces urticarias, es, bueno, la descomunal proporción de mi talento.

*samain! respecto a las segundas oportunidades, usted sabe, aquello de poner la otra mejilla. y siempre le quedan de repuesto un par más. sí, las del culo.

*yoni bigud! claro que podría funcionar, peores cosas hemos visto. lo he dicho alguna vez, y no creo que me canse de repetirlo: no es que yo brille, es que la monada no para de apagarse. un saludo para usted.

*gamar! conocida es la frase, dicha hasta la extenuación, eso de ‘el amor es ciego’. parafraseo ahora, con mis tremendas dificultades expresivas, a los catupecu, y digo: eso espero.

*mr. verbal kint! por lo general, las chicas que han tenido el particular fastidio de conocerme, suelen marcharse con la simpática certeza de saber que jamás tendrán que soportar una segunda parte, conmigo. al mismo tiempo, se llevan de regalo, presentoyentregoenestaextraordinariaofertavanallevar, el hecho de saber que cualquier cosa que les suceda en el futuro no podrá ser tan malo como lo que les ha tocado vivir. un saludo.

Caia dijo...

Me suena familiar el post, y que nos vaya bien a todos.

sergio dijo...

Ahora solo falta hacer la contraparte. Porque no va a defenestrar asi como asi al alcohol cuando tantas alegrias tambien nos trajo y trae.
Seria algo como: Gracias a el me encare la mina que me gusta, le dije lo que pensaba a mi jefe, me di cuenta que era gay y cosas por el estilo.
Usted seguro lo va a poder describir mejor.
Saludos!

Anónimo dijo...

Y Mónica, una vez superada la sorpresa, va a pensar que en el fondo es un buen tipo porque es sincero y no le ocultó nada... vaya a saber qué clase de monstruo se podría cruzar por su vida si lo deja!!

Flor dijo...

Es GENIAL.

Alfredo García Cid dijo...

Bien. Mientras leía me atrapó una angustia muy desagradable.
Me gustó.