Alguien dijo alguna vez, intentando ofender a otro autor, refiriéndose entonces a su obra, ‘no tiene cualidades perdurables’. A mí me agradó el concepto. Se refiere a que uno lee un libro, y si tiene suerte, queda fascinado. A veces pasa. Vuelve a leerlo, diez años después, en busca de una chispa de magia, de esa fascinación primera, pero no ocurre nada. Queda el regusto amargo, y las ganas de saber si cambió el libro, o si cambió el lector.
¿A quién atribuir la ausencia de cualidades perdurables?
Lo mismo me ha sucedido al verte desnuda. Sigamos con el libro, por favor.
¿A quién atribuir la ausencia de cualidades perdurables?
Lo mismo me ha sucedido al verte desnuda. Sigamos con el libro, por favor.
2 comentarios:
supongo que cada cosa tiene su momento y por eso nos impactan más ciertas cosas la primera vez que las vemos o bien al contrario, hay otras que necesitamos verlas, leerlas, tenerlas una y otra vez para descubrir y entender realmente lo increïbles que son.
besines
^^
*stel! es evidente que tiene usted la actitud correcta. me temo que cuando yo llegué, esa ventanilla estaba cerrada.
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